CHAPA TU BICI
En Barcelona la gente se mueve en moto y en bicicleta. Aunque me encanta caminar, creo que también puedo ahorrar tiempo cuando la situación lo amerite. Con esta tarjetita del sistema Bicing, que cuesta 45 euros, puedo trasladarme en bicicleta durante un año, las 24 horas. Claro que tiene sus restricciones y en hora punta todos quieren una bicicleta, pero no es para alarmarse. La estación más cercana a mi casa está a un par de cuadras, así que no me puedo quejar.
Mientras pedaleaba, intentaba recordar la última vez que manejé una bicicleta. No lo recordé, y aún no lo recuerdo con exactitud. Creo que aún era una adolescente que solo daba vueltas a la manzana en el Rímac, Lima, Perú. A pesar del tiempo transcurrido, mis piernas respondieron bien al desafío de subidas y bajadas. La ciudad también ayuda, con carriles para ciclistas y semáforos con indicaciones específicas para quienes vamos en dos ruedas.
Mi primera excursión en bicicleta fue a cinco librerías (Casa del Libro, +Bernat, Altaïr, La Central y Abacus). Es una buena experiencia para entrenar el cuerpo y la mente. Lo único que no haré es ir al trabajo en bicicleta, porque las subidas son de terror. En cambio, las bajadas serán una aventura. No se preocupen, antes de arrancar revisaré los frenos, jejeje.
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